El uso de los mapas. Cartografiar en América latina (siglos XIX-XXI) – XVII Coloquio internacional del CRICCAL

Université Sorbonne Nouvelle – Paris 3
Maison de la Recherche
Salle Claude Simon
4 rue des Irlandais – 75005 Paris

11 – 12 – 13 de marzo de 2021

Coloquio en presencia y en línea

Convocatoria
Al interrogar los espacios desde la complejidad de los discursos, como forma de inscripción y de configuración de los mismos en y por los campos sociales, políticos, históricos y culturales, la reflexión sobre los mapas, la cartografía y la topografía prolonga los análisis del CRICCAL sobre el espacio y la espacialidad, llevados a cabo tanto en el último coloquio sobre los espacios públicos como en el seminario sobre la frontera.

El coloquio El uso de los mapas. Cartografiar en América latina (siglos XIX-XXI) corresponde a nuestro afán de convergencia entre prácticas disciplinarias diversas. Así, tanto los estudiosos de la literatura como los historiadores y por supuesto los geógrafos pueden participar en la reflexión: los primeros con sus prácticas de lectura y desciframiento, los historiadores por su aproximación a los mapas en tanto productos sociales, discursivos y epistémicos.

Un libro reciente de Julien Nègre L’arpenteur vagabond. Cartes et cartographies dans l’œuvre de Henry David Thoreau (2019) multiplica, para tomar un ejemplo, los modos concretos de intervención a partir de y sobre los mapas por parte de un extraordinario narrador que es uno de los precursores del pensamiento ecológico actual. Una exposición, también reciente, « Nous les arbres/Nosotros los árboles » en la parisina Fondation Cartier pour l’art contemporain (12 juillet 2019- 5 janvier 2020), brindaba la ocasión de ver los fascinantes “mapas de la selva” dibujados por el botánico Francis Hallé. Esos mapas son paradigmáticos de una construcción del espacio selvático como ecosistema, es decir no en tanto representación “realista”, icónica o mimética, del espacio sino como construcción holística de un espacio de interacciones que recuerda los mapas fenotípicos de Alejandro de Humboldt (Cosmos. Ensayo de una descripción física del mundo, 1845).

Muy interesantes también nos parecen algunos textos genéricamente ambiguos: pensemos, por ejemplo, en los apuntes de un José de Caldas, que amalgaman consignaciones científicas precisas (altimétricas, orográficas, botánicas…) y consideraciones más “literarias” o, por lo menos, en relación con las poblaciones y su hábitat a lo largo de la Historia, como la observación de unas huellas por las que se inscribe la profundidad histórica subyacente en la elaboración cartográfica.

El problema del mapa, que va de su elaboración a su lectura, nos parece pues no solo propiciar un diálogo interdisciplinario: lo hace indispensable para abarcar el fenómeno en toda su complejidad.
Los interrogantes girarán en torno a lo que significa abrir un mapa, desplegarlo, leerlo, viajar por él, antes de “reintegrar” el espacio que el mapa modeliza. ¿Debemos tomar el mapa como una grilla de lectura, como algo que constriñe y/o como la imposición de un saber-poder? ¿Debemos considerarlo como un “punto de partida”, como el “trazado de vectores en el marco de una toma de posesión” o como el principio de un viaje infinito?

El mapa como objeto de saberes
Se considerarán los mapas en su sentido originario, concreto, de representación del espacio en un soporte donde se consignan saberes establecidos, conjeturales o hipotéticos.

Considerando que el mapa no es un objeto mimético sino semiótico –y que cualquier régimen semiótico es un producto histórico que debe “situarse” –se tratará de considerar los mapas como discursos sobre lo real y como discursos de lo real, es decir como modelización de nuestra relación con lo real, estrechamente vinculada con las epistemes y la constitución de los saberes: ¿cuál es la naturaleza de esos saberes? ¿cuáles son sus fronteras constitutivas?

Más allá de aquello que registran, y siguiendo una dinámica recíproca, nos interrogaremos también sobre el horizonte al que se abren los mapas, puesto que si los mapas son lugares donde quedan asentados una serie de saberes, son también lugares de proyectos, incluso de proyecciones. Es sabido, por ejemplo, que la geografía se “proyecta” en los mapas, a partir de escenas y escenarios históricos que dan lugar a otros tantos “mapas intelectuales”, fuentes de nuevas concepciones culturales, históricas y geográficas, tanto regionales como nacionales. Asimismo, el mapa como “discurso histórico” puede alimentar la memoria histórica.

Se podrá abordar también el problema del mapa y del imaginario, hasta de los mapas imaginarios o de los mapas de lugares imaginarios, con tal que la matriz geográfica participe concretamente en la elaboración de ese imaginario.

Así como el mapa determina el espacio –posible– de un saber, los “blancos” en el mapa podrían ser constitutivos de cualquier forma de saber, lejos del sueño (o de la pesadilla) de un mapa como totalización o ilusión de una coincidencia perfecta con lo real (piénsese en el mapa borgeano que se describe en “Del rigor de la ciencia”).

También se tomarán en cuenta la diversidad de los mapas como mediadores o matrices de la espacialidad y los procesos de elaboración del instrumento cartográfico, ya sea en relación con la inscripción toponímica/etimológica, con el “espesor” de los mapas como palimpsestos cargados de historia o con las dinámicas de superposición de los mapas, por vías a veces conflictivas.

Concepciones y lecturas de los mapas
Considerar los mapas como espacio de fijación de saberes en un momento dado no impide tener en cuenta su movilidad, ni relacionarla, por ejemplo, con el instante –o los instantes– de su trazado. Podremos por lo tanto preguntarnos acerca de las prácticas cifradas o codificadas implícitas en la fijación de mapas, acerca de las convenciones que existen entre aquellos que dibujan los mapas y las comunidades a las cuales están destinados y, por último, acerca de las leyendas como « alfabetos » y elementos de descodificación.

Nos preguntaremos también por la lectura de los mapas: ¿qué significa leer un mapa o leer en un mapa? ¿Qué significa descifrar un mapa? ¿Qué relaciones podemos establecer entre la lectura de un mapa y la lectura de un texto?

Del mismo modo, el análisis semiótico del mapa como conjunto de signos y como sistema significante remite a la experiencia estética de los mapas y a su rol icónico de imágenes interpretables como todo signo visual, acompañado o no de una leyenda.

Por ejemplo, el mapa invita a los historiadores a pensar el modo en que las representaciones artísticas “historizan” los territorios, mientras que el territorio parcelado o fraccionado por el catastro “territorializa” la historia al agrupar a los individuos, las comunidades y la tierra como un texto espacial (Arias Gómez).

Los mapas también invitan a analizar las lecturas históricas, económicas, sociales y culturales de todas las variantes de las esquematizaciones territoriales (geográficas, políticas, eclesiásticas, etc.) en el curso de un periodo histórico dado (y hasta el día de hoy).

Usos y manejos de los mapas
La dialéctica del mapa como fotografía o como cuadro incita a considerarlos como final de un proceso e inicio –y despliegue– de otro, distinto. En efecto, el significado de los mapas no puede disociarse de la forma en que se manejan en marcos individuales, colectivos o comunitarios: así, los mapas permiten redescubrir un territorio o un espacio.

Los historiadores podrán analizar los procesos conflictivos que resultaron de la confrontación de cartografías elaboradas antes y después de ciertos periodos históricos, y de las dinámicas creadas por sus actores (instituciones eruditas, políticas y jurídicas, comunidades, individuos, etc.).

Aunque los mapas se entienden clásicamente como una “proyección” del poder sobre la página, también son un ejemplo de la circulación de los saberes en varias escalas: la imperial, la nacional y la local. En el contexto de los imperios coloniales europeos, esta producción no hubiera sido posible sin los saberes indígenas que a su vez dieron paso a representaciones europeas o mestizas del espacio. Durante los periodos “nacionales”, la elaboración de mapas —y la creación de numerosas sociedades de geografía encargadas de trazar los límites entre las nuevas naciones– acompañaron un proceso de transición gradual, pasando de conceptualizaciones jurisdiccionales a concepciones territoriales de la frontera elaboradas con vistas a reafirmar soberanías americanas.

Los historiadores también podrán interrogarse acerca de los mapas del poder con su esquematización de las extensiones territoriales en contextos de inestabilidad regional o nacional, como en el caso de la cartografía de los «nuevos territorios» del «desierto» en Argentina en siglo XIX, de los mapas simbólicos relacionados con las estrategias geográficas dictadas por la necesidad de controlar y delimitar ciertos espacios. Más generalmente, los historiadores podrán interesarse por los usos militares y / o civilizadores de los mapas y por la manera en que las cartografías del siglo XIX han evidenciado procesos de dominio y nombramiento del espacio, a menudo en relación con ciertas élites letradas, estando éstas al servicio de proyectos ideológicos, como es el caso en la época de la Reforma en México durante la segunda mitad del siglo XIX. (Soriano Salkjelsvik)

El mapa es también el del viaje y de los viajeros. En este campo, nos interesarán no solo los mapas elaborados antes de los viajes, en las etapas imaginarias de su preparación, sino también aquellos elaborados a posteriori, establecidos a partir de la experiencia.

Sin perder nunca de vista la materialidad del mapa como lugar de inscripción de lo inmaterial, la noción de «experiencia» del mapa podrá llevarnos también hacia lo «geopoético» (K. White): ¿en qué medida pueden los textos literarios a su vez cartografiar, dibujar recorridos, trazar líneas, yuxtaponer paisajes?; ¿según qué catastro, siguiendo qué método? No se trata aquí de retomar la cuestión del paisaje en su descripción, sino de examinar en qué condiciones se construye una intención cartográfica o aquello que, siguiendo a Roland Barthes, podríamos llamar “cartografemas”.

Finalmente, los historiadores podrán interrogarse acerca de los vínculos entre mapas e historiografías regionales: ¿en qué medida el desarrollo de éstas en el siglo XIX puede asociarse a la evolución de la geografía y de las cartografías como lugar de reflexión y de replanteamiento de los vínculos entre espacio e historia? Se podrá indagar la función de los mapas en la aparición y/o en el tratamiento de las nociones de regiones “geográficas”, “culturales”, “políticas” o “históricas”.

Plazo de la convocatoria :

Envío de propuestas: Apellido, Nombre, Universidad, dirección electrónica, título de la ponencia y resumen (10 a 15 líneas). Enviar a criccal@sorbonne-nouvelle.fr
Fecha límite: lunes 14 de diciembre de 2020
Formato de las ponencias: 20 000 a 22 000 caracteres, con bibliografía, espacios y notas incluidos (ponencia: 20 minutos)

Bibliografía liminar
Andermann, Jens, Mapas del poder: una arqueología literaria del espacio argentino, Rosario, Beatriz Viterbo, 2000.

Appelbaum, Nancy P., Mapping the country of regions. The chorographic Commission of nineteenth-century Colombia, The University of North Carolina Press, 2016.

Arias Gómez, María Eugenia, « Disciplinas ligadas a la historia. La geografía”, Cosecha histórica regional en México. 1890-1915, México, Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 2008, p. 19-31.

Black, Jeremy, Maps and politics, Chicago, University of Chicago Press, 1997.

Berdoulay, Vincent; Mendoza Vargas, Héctor (eds.), Unidad y diversidad del pensamiento geográfico en el mundo. Retos y perspectivas, México, IG-UNAM, 2003.

Cauquelin, Anne, Le site et le paysage, Paris, PUF, 2002.

Collot, Michel, Pour une géographie littéraire, Paris,Corti, 2014.

Colombi, Beatriz, Viaje intelectual. Migraciones y desplazamientos en América latina (1880-1915), Rosario, Beatriz Viterbo, 2004.

Dumasy-Rabineau, Juliette ; Gastaldi, Nadine et Serchuk, Camille, Quand les artistes dessinaient des cartes – Vues et figures de L’espace francais – Moyen Age et Renaissance, Paris, Le Passage/Archives nationales, 2019.

Dym, Jordana; Offer, Karl (eds.), Mapping Latin America. A Cartographic Reader, Chicago, University of Chicago Press, 2011

Guillorel, Hervé, Toponymie et politique. Les marqueurs linguistiques du territoire, Bruxelles, Bruylant, 2008.

Jacob, Christian, L’empire de cartes. Approche théorique de la cartographie à travers l’histoire, Paris, Albin Michel, 1992.

Lapouge, Gilles, La légende de la géographie, Paris, Albin Michel, 2009.

Lois, Carla; Kantor, Iris (eds.), Mapas para la nación: episodios en la historia de la cartografía argentina, Buenos Aires, Editorial Biblos, 2014.

Manguel Alberto, Voyages imaginaires, Paris, Robert Laffont, 2016.

Mendoza Vargas, Héctor (coord.), México a través de los mapas, México, IG-UNAM / Plaza y Valdés Editores, 2000.

Mendoza Vargas, Héctor; Lois, Carla (eds.), Historias de la cartografía en América latina: nuevos caminos, viejos problemas, México, IG-UNAM, Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, 2009.

Mundy, Barbara, The mapping of New Spain; indigenous cartography and the Maps of the Relaciones Geográficas, Chicago, University of Chicago Press, 1996.

Múnera, Alfonso, Fronteras imaginadas. La construcción de las razas y la geografía en el siglo XIX colombiano, Bogotá, Editorial Planeta colombiana, 2005.

Navarro Floria, Pedro; Lois, Carla, Paisajes del progreso: la resignificación de la Patagonia Norte 1880-1916, Neuquén, Universidad Nacional del Comahue, 2007.

Nègre, Julien, L’arpenteur vagabond. Cartes et cartographies dans l’oeuvre de Henry David Thoreau, Lyon, ENS Editions, coll. « Signes », 2019.

Nicolson, Malcom, “Historical introduction”, In Wilson, J. (ed.) Alexander von Humboldt’s Personal Narrative of A Journey to the Equinoctial Regions of the New Continent, London, Penguin Books, 1995, p. ix-xxxiv.

Oslender, Ulrich, “Another history of violence. The production of geography of terror in Colombia’s Pacific Coast Region”, Latin american perspectives, 35, 5, 2008.

Raj, Kapil, “Connexions croisements, circulations. Le détour de la cartographie britannique par l’Inde, XVIIIe-XIXe sièlces”. Michael Werner, Bénédicte Zimmermann (eds.). De la comparaison à l’histoire croisée, Paris, Seuil, 2004.

Soriano Salkjelsvik, Kari, « En busca de un mapa final: geografía y prácticas de territorialidad en el siglo XIX mexicano”, Iberoamericana-Nordic Journal of Latin American and Caribbean Studies, 47(1), pp. 13-23.

Speranza, Graciela, Atlas portátil de América latina. Artes y ficciones errantes, Anagrama, 2012.
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Turchi, Peter, Maps of the Imagination: the Writer as Cartographer, Texas, Trinity University Press, 2004.

Westphall, Bertrand, La géocritique. Réel, fiction, espace, Paris, Editions de Minuit, 2007.


, Le monde plausible. Espace, lieu, carte, Paris, Editions de Minuit, 2011.

Hors du monde. La carte et l’imaginaire. Bibliothèque Nationale et Universitaire de Strasbourg, 2019.

Beitrag von: Gianna Schmitter